La celebración del Domingo de Ramos inicia el calendario de procesiones, se bendicen las palmas y ramos de olivo a todos asistentes, en especial a los más pequeños.
Muchos vecinos de Aguarón descienden los poco más de tres kilómetros que separan la ermita de San Cristóbal de la localidad, acompañándolo y, al anochecer: oraciones, música, replique de campanas y rostros emocionados al ver otra vez al Nazareno, cargado con la cruz, entrando en el pueblo. Ha comenzado la Semana Santa, otra importante tradición en Aguarón, en la que se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Cristo, con el particular acento que le concede la Cofradía de Jesús Nazareno.
El Lunes de Pascua, fiesta local en Aguarón, se vuelve a subir en romería a la ermita donde, si el día acompaña, los aguaroneros comen con familia y amigos disfrutando de un día de campo en el Paraje el Santo, privilegiado marco de la Sierra de Algairén.
Estas tradiciones son las que engrandecen a nuestros pueblos. Es una suerte que en la Semana de Jesús esta tradición esté aún vigente, puesto que, creyentes o no, nuestro Nazareno suscita sentimientos difíciles de explicar con palabras, sentimientos que se repiten en todos los pueblos de la Comarca Campo de Cariñena.